Liderada por la computación en la nube y la inteligencia artificial, la digitalización masiva creará puestos de trabajo difíciles de imaginar hoy.
Las nuevas tecnologías y los nuevos modelos de relacionarnos y de consumir, están redibujando el mundo profesional.
Se estima que en 2030, un 85% de las profesiones que existirán, no existen hoy en día, como apuntábamos en un post anterior.
No es sencillo prever cuáles serán estas profesiones del futuro, aunque más adelante apuntaremos algunas y veremos cuáles son las grandes tendencias. Antes, algunas consideraciones generales sobre el trabajo del futuro:
- Respecto a los profesionales:
- Tendrán que reciclarse constantemente, mediante formación continua. La capacidad de aprender cosas nuevas será más importante que las habilidades concretas.
- Necesitarán un mínimo de habilidades digitales, que será muy superior al mínimo actual. Saber interpretar un algoritmo de inteligencia artificial, o conocer qué tipo de mensajes son más convenientes para las redes sociales y plataformas de colaboración, será lo habitual.
- Tendrán que desarrollar habilidades sociales (soft skills), con la misma intensidad que las habilidades técnicas (hard skills).
- Cobra importancia la versatilidad: La capacidad de trabajar en distintos dominios y ambientes y adaptarse.
2.- Respecto al impacto por áreas de actividad:
La digitalización impregna todas las actividades sociales y económicas existentes. Desde la agricultura a la aeronáutica, desde la salud a la construcción. Este proceso imparable hará surgir nuevas profesiones en todos los ámbitos de actividad económica, sin excepciones.
Además del sector puramente tecnológico, los sectores de servicios en general, energía, salud y bienestar, serán los que más profesiones nuevas generen.
3.- Respecto a las profesiones que dejarán de existir:
Aquellas tareas repetitivas, de poco valor añadido, que no requieren de una percepción integral del entorno, que no necesiten de empatía con otras personas, las acabarán haciendo las “máquinas” (inteligencia artificial y robótica).
Esto no quiere decir que se vaya a producir una destrucción neta de puestos de trabajo, sino que habrá una migración de unas profesiones a otras. Si, como nos dice el historiador y escritor Rutger Bregman, nos fijamos en el año 1800, alrededor del 74% de todos los estadounidenses eran agricultores, mientras que en 1900 esta cifra se redujo al 31% y en 2000 a un mero 3%. Sin embargo, esto no ha provocado un desempleo masivo. Al contrario, las cifras de empleo en EEUU han ido en aumento.
¿Qué dicen los diseñadores de futuros que estudian el ámbito laboral?
Universidades, consultoras, grandes empresas, think tanks de todo el mundo están estudiando y analizando hacia dónde irá el mundo laboral, cuáles serán las profesiones del futuro.
De entre todas las iniciativas interesantes sobre prospectiva del futuro del trabajo, destacamos tres:
- Liderada por The Governance Lab (GovLab), The 100 Questions Initiative tiene un apartado sobre el futuro del trabajo que aborda preguntas para las que se están buscando las respuestas más inteligentes, inclusivas y sostenibles. Una de esas preguntas es:
- ¿Qué nuevos sistemas de educación y formación se necesitan para que los trabajadores obtengan beneficios de la tecnología y la automatización? Desde la Fundación Innovación Bankinter, abordaremos este tema en nuestro próximo #FutureTalks con Ángel Cabrera, Presidente de Georgia Tech.
- Workforce of the future: The competing forces shaping 2030, es una iniciativa de PwC que propone y analiza cuatro futuros del trabajo posibles para 2030, de manera que permite analizar escenarios y prever nuevas profesiones en cada uno de ellos.
- Por último, y quizás el más interesante para ver cuáles podrían ser las profesiones del futuro: el proyecto 100 Jobs for the Future, desarrollado por las universidades australianas Deakin University y Griffith University. Este grupo de trabajo ha investigado y analizado:
- las principales tendencias y problemas asociados con los principales impulsores del cambio: disrupción tecnológica, innovación científica, cambio climático, globalización y cambios demográficos;
- los cambios en la forma de trabajar que ocurrirán en los distintos sectores económicos;
- los nuevos trabajos que surgirán en el futuro como resultado de estos cambios; y
- las habilidades que se necesitarán para estos nuevos trabajos.
¿Por dónde van las profesiones del futuro?
Si juntamos la inmediatez que brindará 5G, los avances en realidad virtual y aumentada, el Internet de las Cosas (IoT), la inteligencia artificial y más en concreto el aprendizaje automático (machine learning) y la computación cuántica, podemos asegurar que surgirán nuevas profesiones relacionadas directamente con esas tecnologías. Además, podemos predecir que existirán trabajos relacionados con las nuevas necesidades e inquietudes de la sociedad:
La realidad virtual y aumentada para uso lúdico traerá profesiones como decorador, estilista o arquitecto de realidades virtuales.
Para uso profesional, podemos pensar en profesiones de soporte en remoto con interacciones virtuales en multitud de ámbitos: desde mecánicos de automoción o técnicos del hogar, hasta contables o financieros especialistas que resuelven dudas puntuales o guían al cliente en un proceso de decisión.
En el ámbito de la salud y el bienestar, se crearán profesiones relacionadas con los últimos avances en neurociencia, alimentación y genética.
Para ilustrar las posibilidades de las realidades virtuales y aumentadas, baste citar que ya existe hoy en día una oferta de trabajo para ser ¡jardinero de Minecraft!
Por otro lado, en un mundo tan cambiante, que se mueve tan rápido, la profesión de futurólogo (o prospectivista), resultará imprescindible.
Por último, no tan directísimamente vinculado con las nuevas tecnologías, sino con las tendencias sociales, surgirán nuevas profesiones de especialistas de negocio y técnicos alrededor de dos grandes áreas:
- La creciente preocupación medioambiental, en cuatro dimensiones:
- - Economía limpia, energías limpias.
- - Economía circular.
- - Restauración de la biodiversidad.
- - Reducción de la contaminación.
- La creciente preocupación por la cohesión social, la salud y el bienestar de todos los colectivos humanos. Por ejemplo, el incremento de la longevidad con buena salud, hará que surjan nuevos servicios no sólo de entretenimiento y ocio sino también de formación y asesoramiento.
En resumen, surgirán muchas profesiones nuevas y otras desaparecerán. Por todo lo expuesto anteriormente, estamos convencidos de que el saldo será positivo, requiriendo un esfuerzo de por parte de todos los actores sociales: administración, academia, empresa y profesionales.
De ahí que cerramos este artículo con una cita de Jack Ma, cofundador y CEO de Alibaba, que resume el espíritu de hacia dónde podríamos ir:
"Si las máquinas pueden hacer mejor las cosas, tenemos que cambiar la forma en que enseñamos. Las cosas clave son el valor, la creencia, el pensamiento independiente, el trabajo en equipo, el cuidado de los demás, asegurarse de que los seres humanos son diferentes de las máquinas".
Es decir, las profesiones del futuro requerirán, además de una fuerte componente digital, de habilidades interpersonales, creatividad e imaginación, y versatilidad.